La conferencia de prensa surrealista que Donald Trump concedió en 1997 para analizar el peso corporal de Alicia Machado

El 17 de mayo de 1996, Alicia Machado, una venezolana de 19 años, fue coronada Miss Universo en Las Vegas. A finales de ese mismo año, Donald Trump compró ese concurso de belleza.

Ocho meses más tarde, pero esta vez en la ciudad de Nueva York, mientras Machado se subía a una bicicleta estática, Trump, el nuevo productor ejecutivo del concurso, se situó a su lado rodeado de camarógrafos y reporteros locales, y flanqueado por un entrenador personal.

“El año pasado estuve en el concurso de Miss Universo”, le comentó Trump a la prensa. “Noté que Alicia era una de las mujeres más hermosas que había visto. Era increíble”.

Sin embargo, después de ganar el concurso, el magnate de bienes raíces comentó que Machado había subido un poco de peso.

“Alicia es como yo y muchas otras personas. Me encanta comer, a todos nos gusta comer”, comentó Trump, apuntando que Machado había viajado por el mundo “bajo mucha presión” para promocionar el concurso.

“Cuando algunas personas se sienten muy presionadas, no comen”, explicó. “Otros en esa misma situación comen demasiado”.

Trump afirmó que Machado era de esas últimas.

“Disfruta comiendo”, dijo.

El martes, la CNN publicó imágenes de la rueda de prensa en la que Trump y un entrenador analizaban de manera informal qué necesitaba hacer Machado para recuperar su peso anterior. Más tarde, Machado declaró que ese día simplemente iba a practicar ejercicio en el gimnasio y que la tomaron por sorpresa unos reporteros que Trump había invitado.

“Esto es lo que hará ahora, tiene uno de los mejores entrenadores del mundo”, comentó Trump. “Él ha estado trabajando con ella durante los últimos días. Creo que aparecerá en el concurso pesando un poco más que cuando lo ganó, pero creemos que será mejor”.

Cuando Machado ganó, pesaba 53 kilos, explicó Trump. Sin embargo, aunque ese era su peso cuando le cautivó con su belleza, Trump y su entrenador tenían en mente un objetivo diferente para la joven antes de que se produjera la siguiente elección de Miss Universo.

“Nuestro objetivo es que pese entre 57 y 60 kilos, comentó el entrenador. “Ella lucirá sus 53 kilos para ti y las cámaras. Queremos mantener esa apariencia suave y femenina. No queremos que tenga músculos flácidos ni demasiado prominentes, por lo que hay que mantenerla alejada de las pesas. Queremos que sea femenina y suave, así lucirá lo mejor posible cuando se dirija a entregar la corona”.

“Teníamos dos opciones: dejarlo o hacer esto. Elegimos hacerlo”, agregó Trump.

Mientras el entrenador y Trump valoraban la apariencia de Machado ante la prensa, ella sonreía. Sin embargo, el martes pasado por la noche, Machado le confesó a la CNN que se sintió humillada.

“Tenía mi autoestima por el suelo”, comentó. “Fue el momento más horrible que una joven puede vivir”.

Casi al final del debate presidencial del lunes, Hillary Clinton invocó el nombre de Machado para recordar la larga historia de rudos comentarios que Trump ha hecho sobre las mujeres.

“Una de las peores cosas que ha dicho fue sobre una mujer en un concurso de belleza”, comentó la candidata demócrata. “Adora los concursos de belleza, los apoya y forma parte de ellos. Sin embargo, llamó a esta mujer “Señorita Gorda”. Luego la llamó “Señorita de la Limpieza” solo porque era latina. Donald, ella tiene un nombre: Su nombre es Alicia Machado”.

Trump parecía estar acorralado, con la guardia baja.

“¿De dónde sacaste eso?”, preguntó. “¿De dónde sacaste eso?”.

“Ella se ha convertido en una ciudadana estadounidense”, respondió Clinton. “Y puedes estar seguro de que va a votar en noviembre”.

Machado, quien es ahora una actriz famosa en América Latina, le comentó al New York Times en mayo que durante cinco años sufrió trastornos de la alimentación, anorexia y bulimia, como resultado de la humillación de Trump.

“En ese momento estuve a punto de echarme a llorar delante de las cámaras”, confesó. “Le dije: ‘No quiero hacer esto, Señor Trump’. Él dijo, ‘No me importa’”.

Machado añadió: “Durante los últimos 20 años he ido a muchos psicólogos para que me ayuden a superarlo”.

El martes, Trump defendió su comportamiento con Machado.

“Ella era imposible”, dijo Trump en “Fox and Friends”. “Era la ganadora y había aumentado mucho de peso, lo cual representaba un gran problema”.

Clinton espera que Machado se convierta en un gran problema para la campaña de Trump.

Algunas horas después del debate, la campaña de Clinton dio a conocer un vídeo en el que aparece Machado contando su experiencia con Trump.

“Él me gritaba continuamente”, comentó. “Me decía, ‘Luces gorda’ o ‘Te ves fea’. A veces ‘jugaba’ conmigo y me decía, ‘Hola, Señorita Gorda’, ‘Hola, Señorita de la Limpieza’”.

En una entrevista concedida a Howard Stern en 1997, Trump dijo que Machado era “una máquina de comer”.

El martes, durante una conferencia telefónica con la prensa, le preguntaron a Machado qué opinaba sobre la reacción de Trump cuando Clinton mencionó su nombre en el debate.

“Siempre me ha tratado como un problema menor”, dijo. “Siempre me trató como basura, y esta vez su rostro decía, ‘La basura ha vuelto’. No lo sé, pero creo que su hora ha llegado”.

Dylan Stableford

Editor Senior