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División remece a republicanos de EEUU el día en que el partido debía unirse

División remece a republicanos de EEUU el día en que el partido debía unirse

Por Amy Tennery y Ginger Gibson CLEVELAND, EEUU (Reuters) - Un desafiante senador estadounidense Ted Cruz se negó el jueves a ser el "perrito faldero" de Donald Trump, dejando al descubierto una dañina fisura, en momentos en que el candidato presidencial republicano busca unir al partido y atraer a los estadounidenses a su inusual carrera a la Casa Blanca. Cruz, que quedó en segundo lugar detrás de Trump en la carrera republicana después de una campaña encarnizada, fue abucheado por los delegados en la reunión en Cleveland el miércoles por la noche cuando ofreció un discurso en el que no entregó su apoyo a Trump. El senador conservador de Texas se mantuvo firme el jueves, el cuarto y último día de la convención nacional republicana. El Partido Republicano puso como tema del día "devolvamos la grandeza a Estados Unidos". Cruz, de 45 años, se negó a decir si votará por Trump, quien calumnió a su esposa por su apariencia física y sugirió que su padre tenía relación con el asesino del fallecido presidente John F. Kennedy. "No tengo el hábito de apoyar a la gente que ataca a mi esposa y ataca a mi padre", dijo Cruz en una reunión de la delegación de Texas en Cleveland. "Esa promesa no era un cheque en blanco para permitir que vayas y calumnies y ataques a Heidi, para que yo vaya como un perrito faldero y decir 'muchas gracias por calumniar a mi esposa'", respondió Cruz en voz alta ante los delegados. Trump, un magnate inmobiliario de 70 años, dijo que su discurso de cierre de la convención en que aceptará la nominación presidencial del Partido Republicano tocará asuntos como comercio, ley y orden y seguridad fronteriza. "Creo que mi mensaje es un buen mensaje. Me trajo hasta aquí", comentó a ABC News. Trump ha encendido a las multitudes con promesas de creación de empleos, de rigor en temas de seguridad nacional y de política exterior. La disputa es el último tropiezo en la reunión del partido de cuatro días, que debía ser una ocasión propicia para mostrar el apoyo de los republicanos a Trump, un hombre de negocios de Nueva York que nunca ha sido elegido para un cargo público pero que venció a 16 rivales en las primarias. (dditional reporting by Emily Stephenson, Angela Moon y Michelle Conlin; escrito por Alistair Bell. Editado en español por Silene Ramírez/Patricio Abusleme)